El candidato prorruso y anti-Unión Europea Calin Georgescu ha obtenido una inesperada victoria en la primera vuelta de las elecciones presidenciales en Rumanía, lo que ha generado preocupación en las instituciones europeas. Esta victoria preliminar del candidato populista llega en un momento delicado para la Unión Europea, que había celebrado recientemente el inminente ingreso de Rumanía al espacio Schengen como un triunfo proeuropeo. El giro electoral se interpreta como una muestra más del impacto de la propaganda rusa en Europa, tras los recientes resultados en Moldavia y Georgia. 

Fuentes comunitarias advierten de que Rusia sigue siendo la mayor amenaza al entorno informativo del bloque, y utiliza estrategias de desinformación adaptadas a cada contexto local para influir en la opinión pública y erosionar los valores democráticos. Si Georgescu logra la presidencia y cuenta con el respaldo de sus rivales anti-UE, Rumania podría unirse al creciente grupo de líderes prorrusos en Europa.