Líbano ha puesto fin a más de dos años sin presidente con la elección del comandante del Ejército Joseph Aoun como jefe de Estado. Con 99 de los 128 votos del Parlamento en segunda vuelta, Aoun se ha convertido en el cuarto jefe militar en ascender a la presidencia libanesa. El nuevo presidente cuenta con el respaldo de la comunidad internacional; su nombramiento se ha logrado tras intensas negociaciones políticas.
La elección de Aoun llega en un contexto marcado por un alto el fuego de 60 días tras dos meses de violencia israelí que ha dejado más de 3.300 personas muertas y ha destruido amplias zonas del país. La debilidad política de Hizbulá y la situación en la región, con Siria debilitada y un Irán menos influyente, han facilitado esta transición.