La imagen de la semana muestra el devastador rastro que dejó el agua en un taller en Paiporta, una de las localidades en la zona más afectada por la dana que la semana pasada azotó Valencia. Este espacio, donde Mari Carmen Martínez y José Galarzo daban clases de cerámica, dibujo y pintura, está ahora destrozado, igual que buena parte del municipio. Allí el agua alcanzó los tres metros de altura. “Esta pareja de artistas vive a cincuenta metros de su estudio, en un cuarto piso ubicado frente al barranco del Poyo, que canalizó la devastadora riada del pasado 29 de octubre. Al ver desde su casa que el agua comenzaba a desbordar el cauce del barranco, Mari Carmen y José bajaron a la calle, como tantos otros vecinos y vecinas, para poner sus coches a salvo”, explica el fotoperiodista. La pareja no pudo regresar a su casa aquella noche. Cuando volvieron, todo estaba arrasado. Las últimas cifras ofrecidas por las autoridades hablan de más de 230 muertos y cerca de 80 personas aún desaparecidas a causa de la dana, uno de los peores desastres naturales en España en décadas. Además de los efectivos públicos, miles de voluntarios han llegado a la zona en la última semana para ayudar en las labores de limpieza y tratar de devolver la normalidad a los pueblos devastados.