Esta crónica forma parte del proyecto The Backway de RUIDO Photo y ha recibido el apoyo de National Geographic Society.
Lo conozco en un bar al que solo se llega si sabes dónde está. Estamos sentados ante una mesa cubierta por un mantel de Spiderman, cuya piel arácnido-plástica pisan ceniceros y botellines de cerveza. Dice que se llama Venom, como la némesis de Spiderman.
—Llámame Venom —me insiste a lo Herman Melville.
De la oscuridad brotan conos de luz naranjas, violetas, azules. No es el cumpleaños de nadie, pero del techo cuelgan unos globos dorados y otros con letras: “Happy Birthday”. Sobre la cabina del disc-jockey, ahora ausente, un altavoz escupe música africana. Hoy no hay mucha gente: ayer hubo una redada en Orán y las autoridades argelinas deportaron a diez, a veinte, a nadie sabe cuántos subsaharianos.